Una factura correcta es de gran importancia para el cliente y el proveedor de la red. El cliente espera que la factura refleje correctamente su uso de la red y que la reciba en el momento oportuno. Las facturas incorrectas hacen que el cliente busque una conciliación, lo que influye en la percepción de los clientes sobre la calidad de la red. El proveedor de la red incurre en gastos al gestionar las quejas de facturación, por lo que las facturas correctas satisfacen tanto al cliente como al proveedor de la red.