Varios factores hacen que el control de olores sea una consideración primordial en la ingeniería de ventilación: (1) los métodos de construcción contemporáneos dan como resultado edificios que permiten una menor infiltración de aire a través de la envolvente del edificio; (2) han aumentado las fuentes interiores de olores asociados con los materiales de construcción modernos@ muebles@ y equipos de oficina; (3) el aire exterior suele estar contaminado; y (4) los costos de energía fomentan tasas de ventilación más bajas en un momento en que los requisitos de un ambiente relativamente libre de olores son mayores que nunca.