Esta norma británica es un código de prácticas para métodos de almacenamiento, recolección, segregación para reciclaje y recuperación, y tratamiento in situ de residuos de edificios residenciales y no residenciales y establecimientos de atención médica. Esta norma británica es aplicable a edificios nuevos, renovaciones y conversiones de edificios residenciales y no residenciales, incluidos, entre otros, comercios minoristas y oficinas. No debe utilizarse como única fuente de información. La gestión de los residuos sanitarios procedentes de hospitales y de los aceites usados de cualquier establecimiento no está incluida en el ámbito de competencia de este código de buenas prácticas.