El instrumento más utilizado durante la Segunda Guerra Mundial para establecer la elevación del arma en condiciones de combate fue el cuadrante de elevación. Los instrumentos de este tipo son capaces de ajustar con precisión la elevación del arma con respecto al nivel en un plano vertical. El corazón del dispositivo es un eje (barra de pistola) que se ajustó cuidadosamente en el momento del montaje del arma para que sea paralelo al eje del arma y se mueva en elevación con el arma. Una carcasa que está nivelada transversalmente alrededor de la barra de pistola contiene un vial de nivel cuyo desplazamiento angular desde la barra de pistola en el plano del instrumento puede medirse mediante una escala y un nonio. Después de recibir la elevación del arma desde el centro de dirección de fuego, el instrumento se nivela transversalmente y el vial se desplaza de la barra del arma en la elevación requerida. Luego se eleva el arma hasta que la burbuja del vial esté centrada.