Esta norma europea especifica los requisitos para sistemas y soportes de tuberías industriales, incluidos los sistemas de seguridad, fabricados de materiales metálicos (pero inicialmente restringidos al acero) con el fin de garantizar un funcionamiento seguro. Esta norma europea es aplicable a tuberías metálicas elevadas, canalizadas o enterradas, independientemente de su presión. Esta norma europea no es aplicable a: Tuberías y sus accesorios; Vías fluviales como tuberías forzadas, túneles de presión, pozos de presión para instalaciones hidroeléctricas y sus accesorios específicos relacionados; Tuberías para vehículos cubiertos por los procedimientos de homologación de tipo CEE establecidos en las Directivas 70/156/CEE [1], 74/150/CEE [2] y 92/61/CEE [3]; Artículos diseñados específicamente para uso nuclear, cuyo fallo puede provocar una emisión de radiactividad; Equipos de control de pozos utilizados en la industria de exploración y extracción de petróleo, gas o geotérmica y en almacenamiento subterráneo cuyo objetivo es contener y/o controlar la presión del pozo, incluidas las tuberías; Tuberías de altos hornos, incluida la refrigeración del horno, recuperadores de aire caliente, extractores de polvo y depuradores de gases de escape de altos hornos y cubilotes reductores directos, incluida la refrigeración del horno, convertidores de gas y hornos de vacío y cubetas para fundir, refundir, desgasificar y colar acero y metales no ferrosos; Cajas para equipos eléctricos de alta tensión como aparamenta, equipo de control y transformadores; Tuberías presurizadas para la contención de sistemas de transmisión como cables de energía eléctrica y telefónicos; Tuberías fijas permanentemente para barcos, cohetes, aviones y unidades móviles en alta mar; Tuberías internas en dispositivos médicos tal como se definen en la Directiva 93/142/CEE [4] sobre dispositivos médicos; Tuberías internas de calderas y tuberías integrales a recipientes a presión.